Los de Infantil estamos convencidos, auténticamente convencidos de que los libros son divertidos, entretenidos, mágicos, fabulosos, espeluznantes, risueños, misteriosos, cómicos, románticos, abracadabrantes...y mil cosas más, y además nos proporcionan momentos únicos, inolvidables, maravillosos. Y si estamos convencidos de esto y se supone que el recreo está para romper la rutina de clase y pasarlo muy bien...¿por qué no llevar los libros al recreo, si en ese espacio y en ese tiempo nos proponemos como objetivo fundamental hacer libremente cosas que nos gustan y nos alegran el corazón?
Dicho y hecho, nos hemos llevado una caja cargada de historias y aventuras al patio y hemos podido comprobar que efectivamente, nuestros niños y niñas se lo pasan genial con los libros, disfrutan de lo lindo con ellos, comentan, intercambian, opinan, se relacionan y acaban descubriendo que en el fondo son artefactos diseñados para hacernos la vida mucho más agradable y llevadera.
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